Primera cita del año, 27 de enero, y al ser una hora de encuentro temprana, el Club preparó una merienda con "panades" para coger fuerzas de la visita que teníamos prevista. Nada más y nada menos que la Finca de Raixa.
En cuanto a Raixa, es difícil explicar la belleza de la Finca, y para entenderla bien nada mejor que la visita guiada que nos ofrecieron. En pocas palabras, ¡hay que ir a verla!
Y al final, dando gracias a que el tiempo no nos molestó durante la visita; acabamos el día con una comida en el Restaurante Sa Teulera de Sòller.